Hace poco me encontré con un excompañero del trabajo. Hacía años que no sabia de su paradero. Pero entre entre otras cosas me mencionó que su relación con su esposa está muy deteriorada. Y que últimamente ella se ha distanciado mucho de él. Por tal razón él está planeando un viaje a un resort de la isla. Su fantasía es pasarse tres semanas con una chica bella y joven y luego volver y dejarlo todo atrás.
Le comenté que la situación no es tan sencilla como él se imagina. Por lo general lo que sucede es que el hombre se "enchula"con la muchacha y de ahi nace una relación sentimental que al poco tiempo hay que volver a viajar para gozarse a la chica. Y el detalle es que hay que enviarle dinero para tenerla contenta y de esa manera tenerla disponible sexualmente cuando el regrese.
Y claro está desde el punto de vista del hombre, puede ser una relación muy placentera, porque la muchacha se le brinda y está siempre disponible para él, ya que muchas veces ella no trabaja. Algo que no sucede con la esposa, porque esta tiene hijos y responsabilidades tanto fuera como dentro de la casa y por tanto no puede siempre estar a merced de su esposo.
Y como es una relación basada en el interes- ella por el dinero, y él por lo sexual- esa relación termina en fracaso y divorcio una vez que la esposa se entere. Y el hombre termina en ruina económica, porque le entra una inquietud de estar viajando constantemente para tener un maratón sexual con la chica, que luego pasa a ser la amante.
Yo no invento con ese tipo de fantasías porque amo a mi familia y siempre con mi lema:"No me gusta complicarme la vida. Eso de estar llamando escondido y querer estar viajando sólo; es muy difícil buscarse una buena justificación y que la esposa se trague ese cuento. Mi familia y mi Dios son muy importante para arriesgarme tanto y que al final la chica es que sale ganando, pues no pierde nada, pero sí que logra "pelar" al hombre que la busca.
Asi que le dije al amigo que reconsidere su fantasía y que buscara ayuda profesional, es decir que se dieran otra oportunidad para de esa forma su vida marital tome otro rumbo. Nos despedimos y él me dijo que iba a meditar y luego tomaria una decisión.
En el verano me encanta sentarme en el patio y esperar que caiga la noche. Es un placer sentarme en short a tomar fresco y observar las nubes asi como el pasar constante de los aviones. Trato de sentirme como si estuviera en Santo Domingo. ¡En verdad que me trae bellos recuerdos.
Por eso es que me encanta el verano - no por el intenso calor- sino porque el verano nos brinda la oportunidad de estar en contacto con la naturaleza. Nos permite estar al aire libre sin la necesidad de estar con un coat y sentir el intenso frío del invierno
Hay mucha gente que detesta el verano y suelen decir que les encanta el invierno, porque son enemigos del calor. Y verdaderamente a mi tampoco me gusta el intenso calor, pero como que nada es completo, prefiero el verano porque puedo caminar, correr, sentarme en un banco con mi familia o amistades para conversar. En fin que lo que nacimos en climas tropicales extrañamos el verano. Claro que a veces hacen unos calores de madre, pero eso no es diario. Pero tenemos la opción de esos dias de intenso calor permanecer en casa y encender el aire acondicionado. Pero el resto de los dias - que son la mayoria - podemos disfrutar de la libertad de estar a temperatura ambiente.
Si alguien que nunca ha venido a Estados Unidos, y vive en una zona tropical. quizás no esté de acuerdo o no entienda lo aqui expresado. Pero los que vivimos en USA sabemos lo brutal que es el invierno, con la nieve, los vientos helados ect. De ahí que muchos aprecian y anhelan el verano, porque esta estación nos permite estar fuera de casa.
Poco a poco estoy perdiendo la costumbre de estar en el patio mirando el horizonte y sintiendo el frescor del momento, esperando que caiga la tarde y se oculte el sol. Aunque me adapto a todo. Ya no peleo ni con el frio ni con la nieve, pues es una batalla perdida. Tengo que adaptarme a donde estoy. No tengo el poder de cambiar el clima. Tan solo me queda aceptarlo.
Hay que tener mucho cuidado con los mensajes que escuchamos y con lo que a diario pensamos, pues estos repercutiran -sea positiva o negativamente -en nuestro diario vivir. Por ejemplo hace varios años a mi lado trabaja una señora de mediana edad que desde que empezaba a trabajar era quejándose de que queria que fueran las cuatro de la tarde para irse. Eso era diario y lo decia a cada hora. Por mi parte yo bloqueaba su negatividad por medio de hacer mi trabajo de buena gana, porque necesito trabajar para mantener a mi familia. De tal forma que no tiene sentido quejarse de algo que tengo que hacer y que de hecho tengo bastante experiencia haciéndolo y no me resulta difícil de realizar.
Tengo otros compañeros que le pregunto que cómo están y me contestan:" Estamos bien jodidos". Por mi parte le contesto, que los jodidos son ellos, no yo. De esa forma rechazo el mensaje negativo de que me siento infeliz y desgraciado. Aunque a veces en mi trabajos las cosas se complican, ya por la experiencia que tengo yo le busco la solución sin sentirme que estoy "jodido". El asunto es evitar pensar que no estoy en control de lo que estoy haciendo y entonces sentirme angustiado o abatido.
En la noche mucha gente quiere saber el infome del tiempo y si le dicen que al otro dia va a llover, al dia siguiente desde que salen a la calle y llegan al trabajo es quejándose que va a llover, que no se quieren mojar ect. Por mi parte les constesto que no trabajamos en la calle vendiendo hot dog ni somos policias de tráfico. Asi que si llueve resuelvo con una sombrilla o un gorro. De tal manera que hay que adaptarse a lo que nadie puede alterar o cambiar, como es el tiempo.
De manera que hay que prestar atención a lo que escuchamos o estamos pensando, porque muchos de los mensajes que escuchamos de nuestros compañeros de trabajos o amistades influyen en nuestra vida y nos hacen sentir feliz o desgraciados. Asi que tenemos que "filtrar" muchas cosas que escuchamos y rechazarlas de plano. Hay que practicar el pensar positivo. Levantarse con ánimo y darles las gracias a Dios que tenemos trabajo y cierto grado de salud para realizarlo, ya que hay millones de gente desempleada.
La zona del caribe es muy propicia para los huracanes, ciclones y tormentas tropicales hagan mucho estrago. Los que somos del caribe sabemos lo que es un ciclon porque hemos vivido la experiencia en carne propia.
La semana pasada la tormenta Isaac se dió una vuelta por nuestra isla. Y aunque no entró al territorio, aún asi el agua causó mucho daño de bienes materiales. Y a pesar del tiempo que tenemos lidiando con estos fenómenos atmosféricos, su paso por Santo Domingo genera muchos problemas. Incluso esta última tormenta, que no entró al pais, sino que pasó por fuera, paralisó todo el pais.
Claro que estos fenómenos traen mucha agua, la cual causan muchas inundaciones. Eso es inevitable, pero se cayeron puentes que dejaron incomunicados a algunas provincias. Y siendo el caso que vivimos en una area de huracanes, el gobierno debería prestar atención a los puentes que atraviesan rios. Y asegurarse que resistan inundaciones. Para ello los puentes deben tener una buena base que resistan los embate del agua. Es decir que los puentes no sean solamente para cruzar un rio, sino resistentes para este tipo de cosas.
Otra cosa muy crítica es que la gente no quiere colaborar cuando la defensa civil les advierte que deben evacuar la zona por temor a las inundaciones. Mucha gente no presta atención y se resiste a dejar su rancho. Y de verdad que se quedan para esperar el ciclon dentro de la casa. En tv escuché a una señora que dijo que ella no abandonó su ranchito por temor que le robaran sus utensilios domésticos. Y mencionó que en una ocasión anterior ella abandonó su ranchito y cuando volvió le habian robado todo.
Y en verdad que mucha gente vive en zonas muy peligrosas, como cerca de rios y lugares que por efecto del agua hay deslices de tierra, asi como en barrancones ect.Y aunque la tormenta no sea fuerte la precariedad del area y los frágiles materiales en que están hechas estas viviendas, hacen que por muy bien que la defensa civil haga su trabajo, siempre estas zonas paupérrimas serán las más afectadas.
Aunque para muchos sea difícil de entender, estas personas prefieren arriesgar sus vidas, tan sólo para no perder sus enseres domésticos. Esto es: una o dos camas viejas asi como sus respectivos colchones. Un juego de sala roto. Un comedor super usado. Un televisor ect Son cosas que algunos podrían decir que son insignificantes, pero estas personas son muy pobres y las pocas cosas materiales que tienen, la obtuvieron a base de mucho sacrificio.
En una ocasón le pregunté a un cubano el por qué los huracanes hacen menos efectos en Cuba y él me contestó que el gobierno a la fuerza hace que la gente evacue la zona por dónde se cree que la tormenta o ciclón pasaría. Claro como en Cuba hay un régimen de fuerza es más factible hacerlo a la brava, pero hacer lo mismo en Santo Domingo es un tanto difícil por la idiosincracia del dominicano.
Cuando vivia en la Isla, debido al intenso calor del verano, solía usar sombrilla para protegerme del sol, ya que este me afectaba un poco la piel. Y es que el sol del mediodia en adelante, es muy picante y sofocante. Asi que a esas horas usaba sombrilla como protección solar.
No obstante cuando llego a Estados Unidos, al area de New York, no veo a nadie andando con sombrillas en el verano, excepto a varias señoras muy mayores. De tal modo que no me atrevía a usar la sombrilla cuando las temperaturas subian a más de 90 F. Algunos amigos me aconsejaron que no la usara para que no me confundieran con los gays. Además me dijerón que se veía muy ridículo que un hombre anduviera con una sombrilla para protegerse del sol, a no ser que estuviera lloviendo.
Ante tal situación renuncié a la sombrilla y me acostumbré a tomar el sol. Aunque la gran diferencia es que aqui casi no camino, sino que ando en carro hasta para ir al baño. Comento esto es para que noten la diferencia de cultura y costumbres. Por ejemplo tengo entendido que en China y Japón las sombrillas son muy populares tanto en hombres como en mujeres y nadie lo ve mal.
Usualmente no me importa lo que la gente opine sobre lo que me pongo, pero en ese tiempo estaba relativamente jóven y no queria ser el único que anduviera con una sombrilla. Asi que uno se va adaptando al sitio en que vive. En mi vida habia usado guantes, pero por el frio los uso, asi como gorros contra el viento helado del invierno.
