
Mientras estaba en el parque, por casualidad me encontré con un amigo de antaño. Conversamos sobre muchas cosas. Comentó que su vida amorosa habia sido un fracaso, pues, se habia casado tres veces, terminando en divorcio. Con la última, pensaba que habia hallado su alma gemela. La mujer era una"postalita", una Venya Carolina. En la intimidad, era una fiera humana.
Pero al pasar el tiempo, la pasion se fue apagando. A pesar de su gran amor, llegaron a un punto en la cual no podian hablar sin acabar en una discusion. La mujer venia de un hogar donde por nada se discutía y se peleaba. Y esa vivencia, inconcientemente la llevó a su matrimonio. Al principio el se armó de paciencia, esperando un cambio en su persona, pero ese cambio nunca llegó. Mas bien, cada dia las cosas empeoraban. A pesar de amarla tanto, con dolor en su alma, decidieron divorciarse.
A veces el amor no es suficiente para que un matrimonio marche bien. La personalidad en la pareja influye mucho para que la relacion funcione. A veces uno tiende a copiar lo que vivió en su casa y repite el patrón en el matrimonio. Nuestros padres quizás soportaron abuso, maltrato y siempre se la pasaban discutiendo; pero morian juntos. Pero estos son otros tiempos. Nadie quiere ser masoquista, es decir, estar en una relacion de infelicidad, donde haya un ambiente de discucion y violencia.
Cada dia, es más desafiante, encontrar la persona, la cual uno pueda decir: con ella (o) pasaré el resto de mi vida. Muchos de nosotros, felizmente, la hemos encontrado. Sin embargo, el resto, continúa en la larga búsqueda, por hallar el compañero ideal. Pero, si le sirve de consuelo, recuerde: "es mejor seguir solo, a estar mal acompañado"
Pero al pasar el tiempo, la pasion se fue apagando. A pesar de su gran amor, llegaron a un punto en la cual no podian hablar sin acabar en una discusion. La mujer venia de un hogar donde por nada se discutía y se peleaba. Y esa vivencia, inconcientemente la llevó a su matrimonio. Al principio el se armó de paciencia, esperando un cambio en su persona, pero ese cambio nunca llegó. Mas bien, cada dia las cosas empeoraban. A pesar de amarla tanto, con dolor en su alma, decidieron divorciarse.
A veces el amor no es suficiente para que un matrimonio marche bien. La personalidad en la pareja influye mucho para que la relacion funcione. A veces uno tiende a copiar lo que vivió en su casa y repite el patrón en el matrimonio. Nuestros padres quizás soportaron abuso, maltrato y siempre se la pasaban discutiendo; pero morian juntos. Pero estos son otros tiempos. Nadie quiere ser masoquista, es decir, estar en una relacion de infelicidad, donde haya un ambiente de discucion y violencia.
Cada dia, es más desafiante, encontrar la persona, la cual uno pueda decir: con ella (o) pasaré el resto de mi vida. Muchos de nosotros, felizmente, la hemos encontrado. Sin embargo, el resto, continúa en la larga búsqueda, por hallar el compañero ideal. Pero, si le sirve de consuelo, recuerde: "es mejor seguir solo, a estar mal acompañado"