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humor médico

Le dice un médico a otro
-A este señor hay que operarlo enseguida
-¿Qué tiene?
-Plata


Una paciente de sesenta años le pregunta al doctor:
-Oiga doctor, cuando subo la pendiente para llegar a mi casa, me fatigo muchísimo ¿Qué me aconseja tomar? El médico le responde: Un taxi, señora.


Dos cirujanos en un bar ven pasar a un paciente.
-A ese hombre lo operé yo
-¿Qué le sacaste?
-Cuatro mil dólares.


-No sé qué me pasa, me toco la cabeza y me duele, me toco la nariz y me duele, el pie y me duele;
-¿qué tengo doctor?
-El dedo fracturado

Se encuentra el paciente tendido en la cama, en la misma habitación está su médico, abogado, esposa e hijos. Todos ellos esperando el suspiro final, cuando se repente el paciente se sienta, mira a su alrededor y dice:Asesinos, ladrones, mal agradecidos y sirvenguenzas.
Se vuelve a acostar y entonces el doctor confundido dice:Yo creo que está mejorando.
-¿Por qué lo dice doctor? pregunta la esposa.
-Porque nos ha reconocido a todos.

El post operado al cirujano
-Doctor, entienda que se vista de blanco, pero ¿por qué tanta luz?¿Cómo salí?
-Muy mal hijo mio. ¡Yo soy san Pedro!

Como amigos sí pero como amor no

En mi plena juventud, tuve una gran gama de amigas. Una eran muy inteligentes, otras muy hermosas, y aún otras muy serviciales, es decir que siempre estaban ahí para cualquier ayuda que necesitara.

De unas cuantas traté de enamorarme, pero nunca crucé la línea. por temor de perderlas como amigas. Y es que a veces por las conversaciones uno se va enterando de cómo a la muchacha le gustan los hombres y asi deducir que uno no encaja en lo gustos de ella.

Lo que menos espera un hombre es que la muchacha le diga que lo quiere como amigo, y que no lo ve de otra forma. Ya en ese punto  "se dañó la bicicleta", pues ya uno sabe que perdió la amistad y el amor de la chica.

A menudo cuando nuestra amiga se entera que tenemos intenciones amorosas, más allá que una amistad, pues se alejan de uno y lo evitan. Claro que conozco casos en que a veces deciden seguir la amistad y hasta terminan en la cama.

Asi que nunca me tomé ese riesgo. No sé si llamarlo cobardía, pero el caso es que nunca me atreví  a tomar ese riesgo. Aunque estoy hablando de unos veinte años atrás. Hoy la mujer es más liberal y abierta a muchas opciones. Bueno, eso creo.


Caylee Anthony, ¿Por tu madre, dínos quien te mató?

Casey Anthony fue absuelta de asesinar a su hija Caylee con apenas dos años de edad. El caso llamó la atención del pueblo americano, el cual le dió mucho seguimiento al caso.

Este caso involucró años de mucha investigación forense, semanas de testimonios técnicos y muchas horas de exámines de evidencias.

Lo que que resultó extraño fue la actitud de la madre, la cual se demoró un mes para reportar la desaparición de Caylee. Mientras tanto Casey se la pasaba en discoteca y viviendo una vida normal. Fue muy notorio que le mintió repetidas veces a la policia, es decir, que no estaba colaborando para encontrar a la niña.

A lo seis mese fue que a Caylee, alguien la encontró muerta en unos matorrales. El cadáver estaba descompuesto. Como estaba a la interperie, casi no se pudo recoger evidencias, ni ADN que fuera utilisable para involucrar a quien la mató. Es decir que el sol, la lluvia ect casi borraron cualquier evidencia para encontrar a la culpable (s) de tan horrible asesinato.

El jurado, compuesto principalmente por mujeres, hallaron que Casey era inocente porque no hubo suficiente evidencias para declararla culpable. Eso es algo que dejó a mucha gente asombrada, pues no esperaban una decisión de esa naturaleza.

En Estados Unidos el jurado lo compone el ciudadano común, sin importar el nivel académico de la persona. Y en mi opinión eso es una falla del sistema judicial. Lo ideal fuera que el jurado estuviera compuesto por personas que tuvieran cierto entrenamiento y supiera algo de leyes.

Eso es asi, porque en un juicio la parte del fiscal se esfuerza por acusar y hacer culpable a la victima, por su parte el abogado del acusado busca la forma de presentar a su cliente como inocente, aunque este sea culpable. Por eso los miembros del jurado deben discernir quien está diciendo la verdad y quien la está ocultando.

Conozco muchas personas que han servido de jurados, los cuales fácilmente se pueden dejar manipular por los abogados. Recordemos el caso de O.J Simpson. El tipo quedó libre a pesar de las evidencias de ADN que tenia la fiscalía. Incluso sus abogados no dejaron que O.J subiera al estrado a testificar.

Casey Anthony tampoco subió al estrado a responder directamente muchas inquietudes que tenia la fiscalía. La gente queria escucharla y ver sus reaciones y sentimientos. Pero el sistema judicial permite que una persona sospechosa evada un interrogario. Algo que favorece a la persona acusada.

No puedo asegurar que Casey Anthony mató a su hija, pero con su conducta, mentiras y misterios que rodearon el caso, a todos nos dejó con las dudas. Por otra parte, la decisión del jurado nos dejó con la duda de cúan capacitados estaban para un caso tan polémico como el que presidieron.

¡Qué efímera es la vida!

La vida como tal es preciosa, pero a menudo no sabemos valorarla, hasta que caemos en un hospital. La vida es  muy efímera como la vida de una vela encendida. Sin embargo un buen número de personas usan esta realidad como base para vivir una vida fuera de control.

Muchos fuman, beben y hacen todo lo que su cuerpo le plazca, porque su filosofía es que la vida es corta y hay que disfrutarla al máximo. Pero con esa actitud a menudo caen en adicciones de toda clase, perdiendo asi el control de su vida.

Hay una señora que es adicta al tabaco. Ella sabe que el fumar es dañino para su salud y para su bolsillo, pero si pasa un dia sin hacerlo, le cae una inquietud, un nerviosismo que lo único que la tranquiliza es el cigarrillo. Y todo empezó en la escuela, por complacer a los compañeros de clase. Hoy en dia ella no conoce el paradero de ninguno de ellos, pero si le dejaron un gran recuerdo: la adicción al tabaco.

No sabemos cúantos años vamos a vivir, por tal razón debemos de tener control sobre nuestros actos. Muchas veces la mala - buena  -  vida que llevamos en la juventud se paga más tarde, despúes de la mediana edad.

Somos como una vela encendida, que no sabemos exactamente cuando se apagará. A veces un mal viento puede apagar la vela, aunque le quede mecha. De igual modo, nuestra vida puede terminar antes de lo esperado, por mala vida que llevamos más temprano.

Candil en la calle, pero oscuridad en su casa

En el lugar de mi trabajo, hay un señor que lleva años laborando en la empresa. El tipo es un excelente empleado. Muy serio con su trabajo.

Todos lo apreciamos mucho, porque él es muy servicial y a cualquiera lo saca de un apuro. Es una persona muy seria y respetuosa con todo el personal de la compañia.

No obstante, lo he escuchado varias veces, por casualidad hablando con su esposa por el teléfono. Y a decir verdad, no parece que fuera él. El tipo es muy grosero con la esposa. Le habla de mal tono y de muy mala manera. ¡Qué pedante!

El señor con todos nosotros es toda una amabilidad... un respeto sin igual. Sin embargo, parece que en su casa, con su familia, es todo lo contrario.

Y hay personas que tienen dos normas de conducta. Una con los amigos y compañeros de trabajo y otra muy distinta con los miembros de su casa.

Pero con la esposa y los hijos siempre debe haber respeto y consideración. La familia no merece que le hablemos groseramente o de forma hiriente. Nuestra familia es la que debe tener mejor trato que los compañeros de trabajo. Pues los compañeros de trabajo a veces se van y nadie vuelve a verlos. Sin embargo la familia casi siempre está ahí con nosotros, en las buenas y en las malas. ¿No les parece?