La Mecedora, comodidad en movimiento

Desde tiempos inmemorables, la mecedora era o es un artículo indispensable en la sala de toda casa dominicana. Pero, ¿a que se debe la gran popularidad de la mecedora? ¿Por qué son tan cómodas y útiles? Por mucho tiempo las madres han usado la mecedoras para arrullar a sus hijos, para detener sus lágrimas o para las propias madres calmarse sus nervios. Además, a muchos de nosotros nuestras abuelas nos mecian mientras nos contaban un cuento a la hora de acostarnos.

Muchos ancianos encuentran que el suave movimiento del balanceo de una mecedora es un bálsamo tranquilizador para las dolencias y malestares propios de la vejez. Han hallado que después de estar demasiado nerviosos para irse a dormir, unos minutos antes en una mecedora los calma de modo que se sienten con sueño.

No hay cosa más grata que sentarse en una galeria a mecerce mientras se conversa con algún vecino o familiar. Eso es algo que el dominicano que vive en New York en grandes building, extraña en gran manera.

Hay otros beneficios  prácticos de la mecedora. En los países tropicales abundan los mosquitos y el vaivén de la mecedora a veces evitan  su picadura. Además como hace tanto calor, el movimiento sirve como especie de ventilador, para que el aire circule alrededor del que está sentado. Por ser tan práctica, solo me pregunto ¿Quien inventaria la mecedora?