La vida como tal es preciosa, pero a menudo no sabemos valorarla, hasta que caemos en un hospital. La vida es muy efímera como la vida de una vela encendida. Sin embargo un buen número de personas usan esta realidad como base para vivir una vida fuera de control.
Muchos fuman, beben y hacen todo lo que su cuerpo le plazca, porque su filosofía es que la vida es corta y hay que disfrutarla al máximo. Pero con esa actitud a menudo caen en adicciones de toda clase, perdiendo asi el control de su vida.
Hay una señora que es adicta al tabaco. Ella sabe que el fumar es dañino para su salud y para su bolsillo, pero si pasa un dia sin hacerlo, le cae una inquietud, un nerviosismo que lo único que la tranquiliza es el cigarrillo. Y todo empezó en la escuela, por complacer a los compañeros de clase. Hoy en dia ella no conoce el paradero de ninguno de ellos, pero si le dejaron un gran recuerdo: la adicción al tabaco.
No sabemos cúantos años vamos a vivir, por tal razón debemos de tener control sobre nuestros actos. Muchas veces la mala - buena - vida que llevamos en la juventud se paga más tarde, despúes de la mediana edad.
Somos como una vela encendida, que no sabemos exactamente cuando se apagará. A veces un mal viento puede apagar la vela, aunque le quede mecha. De igual modo, nuestra vida puede terminar antes de lo esperado, por mala vida que llevamos más temprano.
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Candil en la calle, pero oscuridad en su casa
En el lugar de mi trabajo, hay un señor que lleva años laborando en la empresa. El tipo es un excelente empleado. Muy serio con su trabajo.
Todos lo apreciamos mucho, porque él es muy servicial y a cualquiera lo saca de un apuro. Es una persona muy seria y respetuosa con todo el personal de la compañia.
No obstante, lo he escuchado varias veces, por casualidad hablando con su esposa por el teléfono. Y a decir verdad, no parece que fuera él. El tipo es muy grosero con la esposa. Le habla de mal tono y de muy mala manera. ¡Qué pedante!
El señor con todos nosotros es toda una amabilidad... un respeto sin igual. Sin embargo, parece que en su casa, con su familia, es todo lo contrario.
Y hay personas que tienen dos normas de conducta. Una con los amigos y compañeros de trabajo y otra muy distinta con los miembros de su casa.
Pero con la esposa y los hijos siempre debe haber respeto y consideración. La familia no merece que le hablemos groseramente o de forma hiriente. Nuestra familia es la que debe tener mejor trato que los compañeros de trabajo. Pues los compañeros de trabajo a veces se van y nadie vuelve a verlos. Sin embargo la familia casi siempre está ahí con nosotros, en las buenas y en las malas. ¿No les parece?
Todos lo apreciamos mucho, porque él es muy servicial y a cualquiera lo saca de un apuro. Es una persona muy seria y respetuosa con todo el personal de la compañia.
No obstante, lo he escuchado varias veces, por casualidad hablando con su esposa por el teléfono. Y a decir verdad, no parece que fuera él. El tipo es muy grosero con la esposa. Le habla de mal tono y de muy mala manera. ¡Qué pedante!
El señor con todos nosotros es toda una amabilidad... un respeto sin igual. Sin embargo, parece que en su casa, con su familia, es todo lo contrario.
Y hay personas que tienen dos normas de conducta. Una con los amigos y compañeros de trabajo y otra muy distinta con los miembros de su casa.
Pero con la esposa y los hijos siempre debe haber respeto y consideración. La familia no merece que le hablemos groseramente o de forma hiriente. Nuestra familia es la que debe tener mejor trato que los compañeros de trabajo. Pues los compañeros de trabajo a veces se van y nadie vuelve a verlos. Sin embargo la familia casi siempre está ahí con nosotros, en las buenas y en las malas. ¿No les parece?
La problemática haitiana
Estando en cierto lugar, escuché un comerciante que viaja mucho a Haití por asuntos de negocios, comentar sobre la realidad haitiana. Y lo que escuché de ese señor, a la verdad es muy lamentable, por no decir otra cosa.
Entre otras cosas, dijo que cuando cualquiera viaja a Haiti se lleva la impresión que el terremoto aconteció hace una semana, pues casi todo luce igual que hace año y medio, es decir enero 2010. Y que se ven muchos edificios destruidos, muchos escombros por doquier ect.
La gente anda caminando por donde se puede. Abundan por doquier los negocios ambulantes. Y nada... que el haitiano se pasa el dia en la chercha, sin hacer casi nada. Y que de noche trabajan duramente para aumentar la población mundial.
El comerciante - que los conoce bastante- dijo que el problema básico del haitiano es que son gente de poca iniciativa. Que espera que otros le resuelvan sus problemas. Inclusó relató su propia experiencia que tuvo en Colombia, cuando a raiz de un mal tiempo perdió su casa. El dice que todos los pobladores al otro dia empezaron a recoger madera donde hubiera y levantaron sus casas.
Su conclusión es que el haitiano tiene poca iniciativa y que se conforma con poca cosa. Y haciendo memoria de cuando vivía en Santiago, sí es notable que el haitiano vivía en cualquier lugar y con muy poca higiene. No sé cuanto ha cambiado esa realidad, pues estoy hablando de hace más de treinta años.
¿Que piensan ustedes del tema? ¿Tendrá el haitiano poca iniciativa?¿Es una problemática cultural?
Entre otras cosas, dijo que cuando cualquiera viaja a Haiti se lleva la impresión que el terremoto aconteció hace una semana, pues casi todo luce igual que hace año y medio, es decir enero 2010. Y que se ven muchos edificios destruidos, muchos escombros por doquier ect.
La gente anda caminando por donde se puede. Abundan por doquier los negocios ambulantes. Y nada... que el haitiano se pasa el dia en la chercha, sin hacer casi nada. Y que de noche trabajan duramente para aumentar la población mundial.
El comerciante - que los conoce bastante- dijo que el problema básico del haitiano es que son gente de poca iniciativa. Que espera que otros le resuelvan sus problemas. Inclusó relató su propia experiencia que tuvo en Colombia, cuando a raiz de un mal tiempo perdió su casa. El dice que todos los pobladores al otro dia empezaron a recoger madera donde hubiera y levantaron sus casas.
Su conclusión es que el haitiano tiene poca iniciativa y que se conforma con poca cosa. Y haciendo memoria de cuando vivía en Santiago, sí es notable que el haitiano vivía en cualquier lugar y con muy poca higiene. No sé cuanto ha cambiado esa realidad, pues estoy hablando de hace más de treinta años.
¿Que piensan ustedes del tema? ¿Tendrá el haitiano poca iniciativa?¿Es una problemática cultural?
¡Llegó el verano!
Este invierno sí que fue bravo. Ya no sabíamos que hacer con la nieve. En particular me tocó quitar mucha nieve. Algo muy agotador.
El buscar parqueo se hizo toda una travesía. Era difícil encontrar uno, en vista que la gente evitaba sacar los carros, por el mismo problema. Asi que estábamos ansiososos de que llegara el verano. Pero, ya está con nosotros.
Claro que cuando la temperatura pasa los noventa, mucha gente añora el invierno. Pero todavia tengo muy fresco en mi mente la remoción de la nieve. Asi que si sube mucho la temperatura, prendo el aire acondicionado tanto en el carro como en la casa.
Como he dicho otras veces, tanto el invierno como el verano tienen sus inconvenientes. Por eso escojo lo mejor de ambos. Nada es completo en la vida
El buscar parqueo se hizo toda una travesía. Era difícil encontrar uno, en vista que la gente evitaba sacar los carros, por el mismo problema. Asi que estábamos ansiososos de que llegara el verano. Pero, ya está con nosotros.
Claro que cuando la temperatura pasa los noventa, mucha gente añora el invierno. Pero todavia tengo muy fresco en mi mente la remoción de la nieve. Asi que si sube mucho la temperatura, prendo el aire acondicionado tanto en el carro como en la casa.
Como he dicho otras veces, tanto el invierno como el verano tienen sus inconvenientes. Por eso escojo lo mejor de ambos. Nada es completo en la vida
Ha caido, ha caido, anthony Weiner
Son muchos los casos de políticos en New York y otras areas que tienen que renunciar a sus cargos público, por estar de falderos. Por estar buscando fuera lo que muy bien tienen en su casa.
No ha valido los casos anteriores, para que esta gente levante cabeza. Pero casi nadie escarmienta en cabeza ajena. Y es que hay que tener mucho cuidado con las mujeres y saber mantener la distancia.
Mucha gente se vuelve estúpido y pierde la inteligencia y el raciocinio al tratar al sexo opuesto. Y más un político de Estados Unidos, que sabe que la prensa al final se entera y hace público el escándalo.
Anthony Weiner es un tipo que salió de un college, pero eso no le valió de nada para que se diera cuenta que estaba caminando en arena movediza. Parece que Weiner tiene algún problema de exhibicionismo, porque le gustaba enviar fotos como si fuera un adolescente, mostrando el pecho y algo más.
Ahora Weiner perdió su reputación, su trabajo y quizás hasta su esposa. Y todo por actuar como un muchacho. Y es que en mucho de los casos, el trago y las mujeres le vuelan la inteligencia y el sentido común a muchos hombres. Asi que...cuidadito con las mujeres.
No ha valido los casos anteriores, para que esta gente levante cabeza. Pero casi nadie escarmienta en cabeza ajena. Y es que hay que tener mucho cuidado con las mujeres y saber mantener la distancia.
Mucha gente se vuelve estúpido y pierde la inteligencia y el raciocinio al tratar al sexo opuesto. Y más un político de Estados Unidos, que sabe que la prensa al final se entera y hace público el escándalo.
Anthony Weiner es un tipo que salió de un college, pero eso no le valió de nada para que se diera cuenta que estaba caminando en arena movediza. Parece que Weiner tiene algún problema de exhibicionismo, porque le gustaba enviar fotos como si fuera un adolescente, mostrando el pecho y algo más.
Ahora Weiner perdió su reputación, su trabajo y quizás hasta su esposa. Y todo por actuar como un muchacho. Y es que en mucho de los casos, el trago y las mujeres le vuelan la inteligencia y el sentido común a muchos hombres. Asi que...cuidadito con las mujeres.
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